El viejo Almacén. BsAs

Surplus Approach

“Es necesario volver a la economía política de los Fisiócratas, Smith, Ricardo y Marx. Y uno debe proceder en dos direcciones: i) purgar la teoría de todas las dificultades e incongruencias que los economistas clásicos (y Marx) no fueron capaces de superar, y, ii) seguir y desarrollar la relevante y verdadera teoría económica como se vino desarrollando desde “Petty, Cantillón, los Fisiócratas, Smith, Ricardo, Marx”. Este natural y consistente flujo de ideas ha sido repentinamente interrumpido y enterrado debajo de todo, invadido, sumergido y arrasado con la fuerza de una ola marina de economía marginal. Debe ser rescatada."
Luigi Pasinetti


ISSN 1853-0419

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Fabio PETRI   Esta obra, traducida por UNM Editora, ha sido originalmente editada en Italia con el título: “Teorie del valore e del...

22 dic 2013

Peligrosa obsesión por el déficit



Por Fabián Amico *


La explicación dominante acerca del efecto de los subsidios es simple: dado que dichos gastos son “financiados con emisión”, por ende generan inflación, llevando a nuevos aumentos del gasto y a una espiral insostenible. Es discutible si cualquier reducción del gasto agregado puede llevar a la desaceleración de la inflación (a propósito, los actuales niveles de utilización de la capacidad en la economía están entre los más bajos de la década), pero en este caso la reducción del gasto público (en subsidios) generaría directamente un shock inflacionario, por la suba de tarifas que le seguiría, lo que constituiría un caso inédito en la comparación internacional y una muestra palmaria de la falta de sensatez y pragmatismo del monetarismo argentino.

Como es difícil argumentar que la baja de los subsidios puede ser antiinflacionaria, se recurrió a la idea de que los subsidios serían regresivos en términos distributivos, además de “insostenibles”. Se dice, por ejemplo, que cerca del 40 por ciento de los subsidios benefician al 20 por ciento de la población de “mayores ingresos”, sin ninguna preocupación por el efecto redistributivo evidente que tendría la reducción de los subsidios por sus efectos inflacionarios.

Un trabajo reciente (Ramos & Serino, CefidAr, DT Nº 47, octubre de 2012) muestra que la quita de los subsidios y su reutilización para otros fines incide negativamente sobre las variables macroeconómicas, promueven una reducción del PIB debido a la caída del consumo privado (incluyendo a los hogares de “mayores ingresos”). Luego, la caída del nivel de actividad impacta negativamente sobre el empleo asalariado, con un claro efecto agregado regresivo.

En verdad la preocupación central no es la equidad. Uno podría subir la cantidad de subsidio a los hogares más pobres, o gravar con impuestos a los de mayores ingresos, sin necesidad en este caso de bajar (ni subir) el gasto. Pero la preocupación “dominante” es el control del gasto y no la equidad. Sin embargo, los subsidios son un gasto en moneda doméstica y como tal es siempre financiable. ¿Acaso habría algún “umbral” tras el cual la situación se tornaría explosiva? El silencio sobre este punto central es desconcertante. A esto se agrega la confusión sobre el significado de la restricción externa, que ahora expresaría una “restricción de oferta” (de energía). La solución –otra vez– sería bajar el gasto público (por ende, los subsidios) adecuando la demanda. Pero interpretar las insuficiencias de la infraestructura energética como una “restricción de oferta” equivale a confundir la situación de subdesarrollo (tecnológico, de infraestructura, productivo, etc.) con un problema de persistente “exceso de demanda”. Como observaban los viejos estructuralistas, la restricción externa es una restricción de financiamiento (divisas) y no una limitación de oferta (“de ahorro”).

El creciente gasto en subsidios no es una causa de restricción externa, sino su consecuencia. Los subsidios funcionan de modo análogo a las retenciones a las exportaciones de granos: amortiguan los shocks inflacionarios externos (los crecientes precios en dólares del petróleo y la energía) y/o los aumentos del tipo de cambio nominal, y dicho gasto debe crecer vis a vis del aumento del valor de las importaciones de energía y/o la devaluación de la moneda.

Algunos dicen que hay mucho “desperdicio” de energía y cuentan coloridas historias de usuarios que calefaccionan sus piletas de natación con electricidad o usan varios acondicionadores de aire 24 horas al día, etc. Pero en el grueso de la población las cosas son diferentes. La energía es un bien básico y la elasticidad de su consumo ante cambios de precios es forzosamente baja. Cuando suben las tarifas de los servicios, los usuarios consumen más o menos la misma cantidad, pero su gasto aumenta y cae su ingreso disponible. Ergo, gastan menos en otras cosas. El efecto contractivo, si no es compensado, produce una reducción del crecimiento y una disminución de las importaciones (entre ellas, de energía). Además, la suba de tarifas puede agudizar la puja distributiva y producir más inflación, con consecuencias inciertas sobre la distribución del ingreso.

¿Es “explosiva” la situación fiscal? El déficit primario fue 0,2 por ciento del PIB en 2012 y el financiero fue 2,5 por ciento, mientras en 2013 el déficit tiende a reducirse. Curiosamente, el severo “Pacto de estabilidad y crecimiento” de la Unión Europea permite un déficit público máximo de hasta 3 por ciento del PIB. ¿Por qué Argentina debería ser más estricta que la Unión Europea?

Quienes están obsesionados por el déficit deberían considerar que el resultado fiscal es endógeno. La política fiscal afecta el equilibrio presupuestario al influir en la situación macroeconómica por su impacto en los ingresos privados y en los impuestos percibidos sobre esos ingresos. Ergo, la reducción del gasto, dado su impacto negativo sobre la demanda agregada y la base imponible, daría lugar a menores ingresos fiscales y un mayor desequilibrio fiscal. Así, incluso para el equilibrio fiscal, sería bueno tener en cuenta la situación macroeconómica general, y no focalizarse en el resultado presupuestario.

En un escenario de desaceleración económica, la combinación de austeridad fiscal y mayor devaluación puede empeorar las cosas, ya que hace más cara (e inflacionaria) la energía importada y profundiza las tendencias contractivas, haciendo incluso más difícil (y costoso) el logro del equilibrio fiscal. En verdad, Argentina sólo mejoró su resultado fiscal cuando creció (y no a la inversa). Por ende, sería conveniente pensar en una agenda de mediano plazo que, al tiempo que sostenga la política de subsidios, apunte a acelerar y profundizar las políticas sustitutivas de energía y recomponer las condiciones generales de financiamiento externo de la economía.


* Economista, coeditor de la revista de economía Circus.

Original: Pagina 12

17 comentarios:

oski dijo...

Estas ideas podrian discutirse en un entorno de equilibrio economico y fiscal, y desde alli, analizar donde conviene a un pais aflojar o apretar algunas tuercas. Pero nunca en un contexto contrario al resto del mundo, que goza de un nivel de vida mas equilibrado que el nuestro, y eso gracias a mantener sus vinculos con otros paises abiertos y limpios, y especialmente sin robar nada a nadie. Con esto quiero destacar la posibilidad y necesidad que tiene cada pais de mover su economia importando y exportando. Aca ya no podemos exportar ni un producto industrial por el descalabro del tipo de cambio en su relacion con los aumentos salariales (que segun Moyano no generan inflacion (????) y cuando podemos exportar los productos primarios se hace lo mas posible para desalentarlos.
Un pais puede manejar el gasto publico tal como hacen los paises escandinavos por ejemplo, cuando sus economias estan en equilibrio.

Unknown dijo...

Oski, Oski Oski
No puedo contestarte porque eso implicaría explicarte muchas cosas que exceden mi paciencia y tiempo disponible para un 24 de diciembre.
En segundo lugar, dado tu comentario, aunque te explicara, no me intepretarias correctamente ya que se nota que nunca leiste sobre finanzas funcionales entre muchas otras cosas.
Por eso lo mejor que puedo hacer el día de hoy es recomendarte algunas cosas para que leas y luego si tenes alguna duda vuelvas a comentar alguna nota de este blog.

Este paper de Ciccone en español: https://54df96b7-a-62cb3a1a-s-sites.googlegroups.com/site/revistacircus/circus-3/ciccone_demanda_y_gasto.pdf?attachauth=ANoY7cpp6Cb-irvGcNitLzfBl0R0IPFbZ4hm5XwpviY2_rrijE-n48onGgYhQfPbmCdXVxIoLJndo4FqTbfuIneXfIiZwHqcX5MNvO4RETswab_tjei3hYMYEOcCCflwRf6QrJNInyJOeQ1eBaySmg7_7fEuQYO5-JWCcQjQLmoYcsBAfFeSLvfsxXGQpP6ZXDihKpMsWLd0EOQYYwrW5robs1OgY2sf4XtuK-5ojbhzZvRvDpTX4mc94MfRi9pnDiGRHLUXZLPd&attredirects=0

El libro Bad Samaritans: The Myth of Free Trade and the Secret History of Capitalism. En google seguro que lo encontras para bajar en castellano y en ingles.

Este leetelo entero, esta en castellano: http://grupolujan-circus.blogspot.com.ar/2011/04/producto-potencial-y-demanda-en-el.html

Para empezar, sobre tipo de cambio y crecimiento: http://grupolujan-circus.blogspot.com.ar/search/label/Amico?updated-max=2013-06-04T11:05:00-07:00&max-results=20&start=7&by-date=false

Para continuar sobre la NO elasticidad de las impo, expo y PBI al tipo de cambio:
http://www.cei.gov.ar/userfiles/Elasticidades%20de%20comercio%20de%20la%20Argentina%201993-2008.pdf

http://grupolujan-circus.blogspot.com.ar/2013/06/tipo-de-cambio-crecimiento-y.html

http://grupolujan-circus.blogspot.com.ar/2013/09/sin-elasticidad-precio-de-las.html

El verdadero impacto de una devaluacion: http://grupolujan-circus.blogspot.com.ar/2013/11/el-impacto-de-una-devaluacion-brusca.html

Todo esto es para arrancar, después hay mucho, mucho, mucho más.

Saludos y Felices Fiestas!

Diego dijo...

Estimado Fabián,

Me parece que no es conducente fomentar vía subsidios el consumo bienes importados, que para colmo se encuentran a precio récord, como lo son los derivados del petróleo que en estas circunstancias de la vida argentina son el principal insumo del sistema eléctrico nacional. El estado argentino no recauda dólares por medio de los impuestos al consumo interno fogoneado.
La verdad es que un aire acondicionado no tiene el valor de mercado que se consigue en Frávega, sino que es conveniente sumarle a dicho costo el de toda la energía consumida durante su vida útil. Esta cuenta a groso modo duplicaría, al menos, el precio al que don Frávega nos lo despacha. Esta dinámica de consumo repleta de insumos importados (derivados del petróleo + Tierra del Fuego) no es sostenible.
El consumo debiera ser menguado y la inversión profundizada para que en un mediano plazo el nivel de vida actual pueda aparecer como sostenible. Pero para eso se necesita un estado que planifique el horizonte a largo plazo.

Unknown dijo...

Diego, se que le escribiste a Fabian, pero dado que todavía no te contestó asumo que no lo va a hacer, por eso te respondo :)
En primer lugar, no se si entiendo bien lo que decís. Los subsidios estimulan el consumo (ingreso que antes se destinaba a pagar una tarifa más cara se usa para consumir otra cosa). Ok. Como en toda economía, una parte del mismo se satisface con oferta interna y otra con oferta externa. El punto es, para vos el problema es qué la demanda en general está aumentando mucho o que la demanda de energía aumentó mucho?
Por lo que decís después asumo que el problema sería la alta demanda de energía, por su bajo precio. Ahora, estás suponiendo que la demanda es elástica al precio. Es decir estás suponiendo que si sube el precio de la energía la gente va a dejar de cocinar 2 veces al día (mínimo) y va a cocinar una vez al día; que en lugar de usar el celular todo el día lo va a usar solo unos minutos; que va a dejar de prender la computadora como lo hacía antes; y que va a preferir morirse de calor antes que comprar un aire acondicionado; etc.
Si el problema es el consumo en general, me parece más productivo aumentar la oferta interna de algunos bienes e insumos antes que bajar la demanda interna (ingresos) de la población.
Respecto a tu segundo párrafo, hay un problema de restricción externa. De divisas. No de inversión. La inversión en algún lugar aumenta, acá o en el extranjero. La solución no es la misma a un problema u otro.
Respecto a tu tercer párrafo, no entendiste el concepto del acelerador. Te pregunto, ¿Cómo pensás incrementar la inversión si al mismo tiempo no garantizás el consumo (demanda) para los bienes que va a producir dicha inversión?
En resumen, en vez de repetir lo que se lee en cualquier diario, por qué la propuesta no puede ser construir centrales nucleares (por ejemplo) para aumentar la oferta de energía y reducir la generación en las centrales térmicas (importarías menos combustible) o construir térmicas a carbon hasta que las nucleares estén finalizadas? O una política de sustitución de importaciones correctamente planificada para reducir la cantidad demandada de insumos y bienes importados cuando la economía crece...?
Es una estrategía a largo plazo construir centrales nucleares y/o hacer sustitución de importaciones. Y son un poco más productivas que la de bajar el consumo y al mismo tiempo querer aumentar la inversión quien sabe cómo.
Saludos

Diego dijo...

Ante todo conviene dejar en claro algo: La demanda en energía es una función positiva de la demanda total. Esto se verifica en todos los países del mundo. De ahí la gran controversia que se plantea entre desarrollo e intento de control del cambio climático. Dado el estado tecnológico en el que la civilización se encuentra todavía esos términos aparecen como contradictorios. En criollo, no hay incremento de la producción sin aumento del consumo de energía, y esta por ahora, viene dada en gran parte por los derivados del petróleo, y estos, deterioran el medioambiente en el que vivimos.
En particular, en la Argentina de la última década, aumentó mucho el consumo de energía a la vez que aumentó mucho también el nivel de producto, tal como pasa en todo el mundo. El dato local es que a ese insumo básico aquí se lo ha subsidiado, y el dato patético es que se lo ha subsidiado teniendo el estado nacional que importarlo, por supuesto a precios de mercado mundial, que en los últimos años orilló los 100 dólares el barril. Carísimo.
Por supuesto que la demanda de energía es elástica al precio. El aumento de la demanda de energía, acá y en todo el mundo, es motorizado por los nuevos consumos, mucho más que por los tradicionales como pueden ser la buena hornalla en donde hervimos los fideos. Salvo el microondas, en las sociedades modernas se viene cocinando de la misma manera hace casi un siglo, y la demanda de energía en ese lapso voló por los aires. Se trata simplemente que el consumo de bienes energéticos refleje en su precio el costo de su producción (porque la industria que los fabrica también está subsidiada) y de uso. De ese modo, seguramente, la penetración de cada nuevo modelo de celular que salga tendrá una penetración menor a la que tiene hoy en día. Imaginarás que el i-pad 5 con todo lo que trae gasta mucha más energía durante su vida útil que el star-tak que ya nos parece tan viejo. Y sí, también, seguramente se pensará mejor antes de comprar el segundo aire acondicionado y se hará la cuenta precio/utilidad con el ventilador de techo. Nada raro, la misma cuenta interna que nos hacemos antes de tomar un taxi un día que estamos llegando tarde a algún lugar o que hace mucho calor o que llueve.
Seguro que sería lo idea aumentar la oferta. Pero ahí está la joda del problema y la temporalidad del mismo. Si las centrales nucleares, hidroeléctricas, a carbón o renovables que dimitan de depender del petróleo importado no están terminadas y en condiciones de abastecer la demanda, el estrangulamiento se te va a presentar. En Argentina durante esta década faltó y todavía falta inversión, y en energía estas, por sus características técnicas, deben ser muy cuantiosas, con un nivel de riesgo no despreciable, y sobre todo a largo plazo.
Las divisas faltan hoy para bancar el modelo tal cual está planteado. Las inversiones faltan para poder reconvertir la matriz energética de modo de disminuir la dependencia de los derivados del petróleo importado, que es una de las cuentas que en estos años viene ahogando al estado.
La oferta de energía no tiene que detrás de su demanda, sino más bien siempre ganándole por un poquito, cosa de que estos huecos fiscales no se generen a cada rato. Sobre todo sabiendo que la provisión de este tipo de oferta es mucho más lenta que el aumento de la demanda, que a nivel individual no más se ha duplicado en menos de 20 años.
Demanda de energía va a haber si es que va a haber civilización. Y esto más allá del sistema político que se adopte. Donde hay crecimiento económico, hay demanda de energía asegurada. Si no asegurás la oferta de energía cualquier proyecto a mediano plazo se ve con un nubarrón en la cabeza. La oferta de energía es un pre-requisito para el resto de las inversiones, por eso se trata de bienes públicos en los que el estado debe tener una fuerte injerencia.

Saludos

Unknown dijo...

Ahora si te voy entendiendo. Entonces, lo que querés hacer es generar recesion en la economía o dejar de crecer tanto. Hay que avisarle a los industriales que empiecen a desmantelar fábricas porque el cese de consumo de aires acondicionados no creo que te mueva mucho el amperímetro de la demanda de energía total.
Cambio climatico y desarrollo. Un poco dificil la veo dejar de crecer y al mismo tiempo desarrollarte y disminuir el impacto sobre el medio ambiente. La innovación tecnológica en tecnologías menos contaminantes y aumentos en la eficiencia de los artefactos son consecuencia del crecimiento y no al revés.
Decis que el precio debe reflejar el costo de produccion. Ahora, sin subsidios vos decís que no tendríamos crisis energética? Estás suponiendo que la demanda de energía es elástica al precio. Te contradecis cuando me dijiste al principio que la demanda de energía depende de la demanda total.
Tambien es contradictorio tu argumento ya que al final me estás diciendo que las inversiones las tiene que hacer el estado. Explicame entonces para qué el estado debería fijar una tarifa igual al costo de produccion si las decisiones de inversion en infraestructura son una decision política, que tranquilamente pueden financiarse (en parte) emitiendo pesos, recuperes o no la inversión con una tarifa de "equilibrio". Estás suponiendo que el estado tambien tiene que recuperar el costo de sus inversiones fijando precios encima del costo de produccion. Cosa que no necesariamente tiene que ser así.
Me parece que ves una restriccion de oferta (de energía), que en argentina particularmente se expresa a través de la restriccion externa. Osea, si pudiesemos pagar importaciones con pesos, no habría ningun problema con subsidiar tarifas (en tu razonamiento). Por eso vos propones reducir el crecimiento para relajar la restriccion externa, mi propuesta es crecer relajando la restriccion externa.
Ahora claro, muy pertinente el discurso este de excesos de consumo o de demanda cuando las reservas están cayendo, la fuga no se detiene y el superavit comercial está cayendo. Es obvio, nos estamos quedando sin dólares. La economía está llegando al límite de crecimiento dado por la restriccion externa (no de energía). Energía en el mundo hay de sobra, que no la podamos pagar es otra cosa.
Concuerdo en que las inversiones de energía las tiene que hacer el estado planificando a largo plazo.
Saludos

PD: vos pensas que los consumidores están haciendo cuentitas en su cabeza de cuánto van a gastar en energía por culpa de un aire acondicionado de acá a 50 años? El futuro es desconocido, entre otras cosas.

Diego dijo...

Silvio,
Me interesa este debate y tus argumentos me sirven para afilar los míos, por eso ahí voy de nuevo.
No sé si sobra la energía el mundo. Desde el punto de vista económico, es decir, su puesta a punto para el consumo (que no es lo mismo suponer yacimientos inexplorados a miles de kms bajo tierra o tener diseños de energías renovables en departamentos de facultades de ingeniería), el precio de la energía reacciona ante cada nuevo descubrimiento en cualquier parte del mundo, es decir, el precio registra la relación entre reservas comprobadas a disposición del mercado. Todo el tema la crisis del capitalismo a partir de la conformación de la OPEP en los 70s, cuando el grupo de países productores se decidió a marcar el nivel de oferta puesto en el mercado, los precios saltaron por el aire porque esa cantidad de oferta no iba a ser suficiente para la demanda agregada mundial. Pero más allá de lo que pase afuera de las fronteras argentinas, hoy nuestro país tiene que comprar derivados del petróleo en el mercado mundial para abastecer su demanda agregada. Si hay o no hay afuera, es tema de la geología, acá adentro no hay para abastecer al menos al 25% de la demanda real. O sea, Argentina se encuentra en una situación estructural en la que a cada punto de crecimiento crece en una proporción mayor el consumo de petróleo importado. Hace rato que dejó de haber autoabastecimiento por lo que cada punto de crecimiento debe ser abastecido con derivados del petróleo importados a precios de mercado mundial. Esa es la situación estructural en la que nos encontramos. Yo a eso lo veo como una suerte de bomba de tiempo. Lo que digo, es que subsidiar una demanda que el estado debe pagar en dólares es suicida. Por los industriales que fabrican electrodomésticos no te preocupés, el día que a ellos no les den más los números, agarrarán su valijita y se tomarán en buque. Los costos hundidos imagino que ya están mucho más que cubiertos con todo lo que han vendido durante esta última década, y si esto le sumamos los subsidios industriales, ni hablar. Los tipos están en la gatera listos para cuando vean que tres meses seguidos figuran en rojo.

Diego dijo...

Continuo el comentario anterior:

La tarifa debiera acercarse al costo de producción para que no se consuma lo que no hay y que al final de la película, vía crisis, esa cuenta la termine pagando el estado, vía deuda acumulada o vía devaluación brusca de la moneda. O sea, el modelo kirchnerista de industrialización no estuvo retribuyendo a uno de los factores de producción. No estoy en contra per sé de los subsidios, sino de subsidiar bienes importados aún cuando las cuentas fiscales muestran debilidades.
No estoy diciendo que quitar los subsidios es la solución a la crisis energética, lo que digo es que fomentar vía subsidios de un consumo cuya oferta no se puede brindar es un suicidio. Después, para intentar resolver el problema, habría que focalizarse en la inversión en oferta energética, que yo creo que no se debe dejar en manos de las empresas privadas como en los 90s, en donde se creía que el precio de mercado iba a fomentar la inversión por sí sola. Pero luego, durante el kirchnerismo, se fomentó la demanda y no se hizo nada en relación a la oferta, entonces lo que ocurrió fue que la demanda trepó rápidamente a valores muy superiores a lo que la oferta local era capaz de abastecer. Así las cosas, la Argentina quedó en una situación muy incómoda, en la que debe invertir para aumentar la oferta a la vez que debe pagar por los derivados del petróleo necesarios para abastecer la demanda agregada a la que se ha llegado. Dos grandes cuentas con las que habrá que surfear intentando que el asunto no desbarranque. Por eso, intentar adecuar los precios a los costos de producción podría ayudar a alcanzar la convergencia entre demanda y oferta local de energía. Además, este tipo de inversiones no suelen financiarse en pesos, valga como ejemplo que tuvieron que ir a buscar a Chevron a ver si sale gas licuado de Vaca Muerta. Con los pesos argentinos no pudimos ni siquiera comprar la tecnología para intentar dicha exploración.
La inversión en energía renovable llega cuando hay un estado que se propone fomentarla. El mercado por sí solo, por más crecimiento que haya, no encara este tipo de inversiones; prefiere abastecerse de petróleo a precios de mercado mundial, en todo caso las fábricas ajustarán su demanda de este insumo haciendo sentir esta decisión en el resto de la economía.

Saludos

Alejandro Fiorito dijo...

diego, fijate en el link pagina 176, y veras que la elasticidad precio es pequeña, de la energia, tal y como dice Silvio.
http://www.eclac.org/publicaciones/xml/4/50484/EstudioEconomico2013completo.pdf

Diego dijo...

Alejandro,

Gracias por el link de CEPAL.
Igual debo decirte que esos gráficos de la página 176 son bastante confusos porque intentan sintetizar todos los diferentes tipos de consumo de energía, y los datos de los que se provee están sacados de diferentes agencias estadísticas. Mucho más conciso para lo que veníamos tratando acá abajo me parece que es este otro link que encontré http://web.ing.puc.cl/~power/alumno07/PWeb%20Ahorro%20energetico/incentivos%20energia/ela.htm

En California la elasticidad precio del consumo de energía es -0.39. California, un estado rico, igual ajustaría un 39% si llegase a duplicar el precio de la energía. Esos números me parecen bastante lógicos e intuitivos. ¿O alguien podría aseverar que, por ejemplo, en Venezuela la disminución del consumo de energía sería ínfimo en caso de llevar los precios de la misma a los niveles que están en Uruguay? ¿Vos me decís que no bajaría en Argentina el consumo de electricidad y gas si las tarifas que llegasen en promedio a los hogares fuese, ponele, del 5% del salario mínimo?
Me parece algo de lo más intuitivo, no veo por qué el consumo de electricidad y gas no reaccionaría, directa o indirectamente, a las señales de precio como sí lo hacen la enorme mayoría de los bienes y servicios que se tranzan en el mercado.

Saludos

Alejandro Fiorito dijo...

Diego, hay cosas que son inelasticas, y estan vinculadas al consumo y el habito. Ni la teoria ni los datos te parecen? ok.

La verdad es que no veo como vas a desarrollar un pais sin demanda en tanto no se esta en pleno empleo de recursos nunca, y se invierte por la existencia previa de demanda. es basico, aunque claro no para los marginalistas. slds.

Diego dijo...

Yo no espero que se me acabe el papel higiénico del baño para ir a comprar uno nuevo. La inversión es mucho más miedosa aún, vive proyectando, pronosticando el mañana. Para empezar porque si jugás siempre en el límite te podés caer. Puedés tener un enero con 1° más de temperatura promedio y en ese caso no tendrás abastecer a la demanda doméstica que tuvo un pequeño porcentaje que prendió el aire acondicionado en un horario que no suele hacerlo.
Estos ejemplos pretenden a penas ser gráficos de la lógica intuitiva. La economía no vive en simple present, sino que hay un juego permanente con el futuro.
Esto no es sólo intuitivo, la energía se tomaba como inelástica allá cuando esta no era tenida cuenta, previo a la Crisis del petróleo en 1973, tiempos en los que se creía que la oferta de energía era infinita y que por lo tanto, su consumo se asimilaba al del aire. Se entendía que se consumía energía respondiendo a otras cosas y no en una relación con el precio que esta pudiese tener. Sin oferta infinita, aparece el factor precio. La tecnología se esfuerza por hacer aparatos más eficientes. Esos autos lanchones que se fabricaban en EEUU en los 50s y en los 60s de a poco se fueron achicando y teniendo motores que hacen el mismo kilometraje consumiendo menos nafta.
Hoy en día la energía orilla el 20% del costo de producción de los bienes que produce una economía moderna. ¿Cómo no va a reaccionar una automotriz si el insumo que le ocupa en un momento 1 el 20% de sus costos aumenta en un 50%? ¿No lo traslada a precios? ¿Y la demanda de autos, después, reacciona igual si tal modelo sale 10 que si sale 11?

El país para que se desarrolle tiene que tener demanda, pero también tiene que tener planificación al menos en los sectores básicos, como ser el de la energía. ¿O te pensás que una central hidroeléctrica o una nuclear se hace de un día para el otro, una vez que se ve la demanda está arañando la oferta? Técnicamente no más son obras de ingeniería que tardan no menos de 5 o 7 años con toda la eficiencia y la tarasca a favor. Tenés que ir calculando cuánto te va aumentando la demanda año a año para así ir pensando en cómo y cuánto agregarle a la oferta, y estos son procesos que requieren de mucha más anticipación que otros sectores que son más como sacar chorizos.

Saludos

Saludos

Unknown dijo...

Diego, en USA por lo menos si sube el precio de la energía (principalmente de la gasolina) cae la demanda de bienes durables de los consumidores porque su ingreso es inelastico a corto plazo. Es decir hay una caida de la demanda, que lleva a una contraccion de la actividad económica y consecuente caida de la demanda de energía.
En el trabajo citado en la tercer nota al pie, de donde se sacan las definiciones de elasticidad de energía, en ninguna tabla se presenta el período para el que fueron calculadas las diferentes elasticidades. Podría pasar que esas caídas en la demanda de energía corresponden a períodos de recesión.
Por otro lado, la elasticidad precio de la demanda no dice nada acerca de causalidad. Solo dice como se mueven dos variables en un intervalo de tiempo.
Saludos

Diego dijo...

Silvio, ¡pero si eso es lo que yo te estoy tratando decir! Si la boleta de la luz te come un mayor porcentaje de tu sueldo, vas a tener menos resto para comprar bienes durables, a los que a su vez, si el precio de la energía sube mucho, voy a empezar a fijarme con mayor atención cuánto es la eficiencia energética que tienen. ¿O por qué existe sino la demanda de autos diesel si son más caros que los nafteros? Básicamente porque el diesel con el que se llena el tanque es más barato que la nafta. El consumidor calcula el ahorro en combustible que hará a lo largo de la vida útil del auto que se está comprando.

Si no es el -0,39, será el -0,3 o a lo sumo el -0,2, pero de ahí no sale el asunto con la tecnología y los precios dados.

Mirá, acá encontré un trabajo de la Universitat de Barcelona hecho en base al mercado español http://webs.uvigo.es/viijpe/pdf/FERNANDEZ.pdf

Los resultados que tienen son más o menos los mismos que aquella otra página chilena. Está bueno porque figura todo bien detallado. Ahí la elasticidad precio de la demanda de electricidad les da aún más que el -0,39 de California.

Saludos

Alejandro Fiorito dijo...

ademas tus comentarios mezclan lo que es la inversion publica con la privada, la primera exogena y la segunda endogena. La inversion no es miedosa, responde a la demanda autonoma en todas partes. Lo que tuviste aca es errores del gobierno en prevision, no quiere decir que hay que bajar la demanda con subas de precios, porque ademas no lograras bajar de un nivel minimo de consumo por habito. Solo volves a mas gente, pobre. Todo lo contrario de la idea de desarrollo.
aca un grafico del acelerador https://sites.google.com/site/graficos1234/home/aceleradorcoremberg.emf?attredirects=0&d=1

Unknown dijo...

Algunas hechos estilizados:

-El crecimiento y desarrollo de los países induce aumentos de la demanda de energía. No se reduce el consumo energético, en términos absolutos, al pasar del subdesarrollo al desarrollo.
En otras palabras, no es esperable una disminución en términos absolutos de la demanda de energía en países cuya riqueza aumenta, sino más bien todo lo contrario (notar que la cantidad de unidades de energía por unidad de producto puede disminuir aun con un consumo energético ascendente).

-La caída en el consumo de carbón es sucedida por un aumento de la demanda de petróleo y gas natural. Dado que dicha oferta se concentra en unos pocos países, a medida que se vayan agotando los yacimientos más pequeños dispersos por el mundo, aumentarán los requerimientos de divisas para importar combustibles fósiles de unos pocos países.
Los países no emisores de moneda mundial podrán encontrarse así con una restricción externa más que con una restricción energética .

-Aumento de la participación del consumo de energía eléctrica a medida que la economía crece y se desarrolla.
Estados Unidos tiene una participación de la energía eléctrica en el consumo total del 35%, mientras que China con un PBI casi similar tiene una participación del 30%.

-Una mayor eficiencia en el uso de energía no reducirá la demanda absoluta de energía, ya que el aumento de la demanda (efecto ingreso) producido por el aumento de la riqueza de la población de los países de bajos y medios ingresos, más que compensará la baja de la demanda debido a la mayor eficiencia (efecto sustitución). En otras palabras, la eficiencia energética no puede disminuir la demanda de energía a nivel agregado sino solamente a nivel individual o en algún proceso productivo en particular.

-A nivel agregado las ganancias de eficiencia generan un aumento de la demande de energía y no una disminución. Es lo que se conoce como la paradoja de Jevons (1865):

““It is wholly a confusion of ideas to suppose that the economical use of fuels is equivalent to a diminished consumption. The very contrary is the truth.”
Jevons mostró como durante la invención de la maquina a vapor, las posteriores mejoras introducidas por Watt a las pioneras de Savery y Newcomen, aumentaron exponencialmente el consumo de carbón por parte de Inglaterra en lugar de disminuirlo.

Dos ejemplos de la era moderna son, en primer lugar las mejoras de eficiencia en los vehículos particulares en Estados Unidos (40% menos de combustible requerido para hacer la misma cantidad de kilómetros, comparando 2005 contra 1960), que fue acompañado de una disminución del número de pasajeros por vehículos (2 en 2005, casi 3 en 1970) y kilómetros manejados por habitantes (22000 km en 2005 contra 15000 en 1960).

Segundo, las ganancias de eficiencia del alumbrado público en Gran Bretaña del 20% no compensaron el aumento del 25% en la intensidad de la iluminación instalada (Mwh por kilómetro de ruta).

-Dado que la mayor parte de la población mundial posee ingresos medios y bajos, a medida que sus ingresos aumenten, la demanda mundial de energía aumentará, principalmente la de petróleo y gas, independientemente de las mejoras o no de eficiencia.

Diego dijo...

Silvio,
Estoy totalmente de acuerdo con los datos que describís respecto a crecimiento económico y consumo de energía. Nunca puse en discusión esos términos. Es más, me parece que si asumimos que a mayor ingreso, aumenta el consumo, creo que es lógico suponer también que a menor ingreso habrá menor consumo. Es la otra cara de la misma moneda. Por eso digo que si aumenta el precio de la energía no es lógico suponer que su demanda no va a caer. La demanda de energía caerá así como cae la de la mayoría de los bienes que sufren un aumento en su precio, así como viceversa, si el ingreso de la persona o de un país aumenta mientras el precio de la energía se queda estático, al poco tiempo aumentará el consumo de energía de esa persona o de ese país como un todo –ponele, Japón, que importa todos los derivados de petróleo que consume -, ya sea porque se distenderá de estar pendiente de apagar las luces innecesarias así como ni se preocupará en cuánto gastan las baterías de los celulares a la hora de ir a comprarse uno nuevo.
Lo de la relación entre eficiencia energética y consumo total de energía lo tengo bien en cuenta. Fijate vos con los mismos datos que me pasás que en las últimas décadas EEUU uso la eficiencia energética para seguir ampliando la industria automotriz. Ellos tienen autos, petróleo también tienen, pero por ahora tienen que importarlo también para satisfacer a su demanda agregada. En disminuir la dependencia de ese insumo primario sobre la industria automotriz y del transporte en general estuvo la tarea del avance tecnológico que permitió la eficiencia energética. Si la eficiencia energética se hubiese estancado en los 60s, estate seguro que la demanda de automóviles en EEUU sería muy inferior que la actual y el crecimiento acumulado de la economía a lo largo de todos estos años también hubiese sido sensiblemente menor al que fue. Todo clarísimo.


Saludos