La figura de Pierangelo Garegnani está indisolublemente vinculada a la crítica de la teoría económica dominante y la reanudación del enfoque de los economistas clásicos y de Marx. Este trabajo se había iniciado desde los años veinte del siglo pasado por Piero Sraffa, de quien Garegnani era el alumno favorito.
Garegnani recibió su doctorado en Cambridge con una tesis sobre la teoría del capital justo antes de la publicación en 1960 del famoso libro de Sraffa Producción de Mercancías por medio de Mercancías. Este libro plantea una acalorada disputa entre un grupo de economistas de Cambridge dirigidos por Pasinetti y Garegnani y economistas estadounidenses encabezados por Paul Samuelson, del MIT. El caso se refería a la posibilidad de considerar a la "cantidad de capital" disponible en la economía del mismo modo que las cantidades disponibles de los otros "factores de producción" - medibles en términos físicos - para acercarse a la determinación de la distribución del ingreso entre salarios y beneficios.
La teoría dominante (conocida como "marginal" o "neoclásica") supone, de hecho, que la cantidad de capital es una cantidad conocida de "valor" antes de la determinación de los salarios, beneficios y precios. Los resultados de la controversia confirmaron, sacando a la luz las manifestaciones más complejas de los errores marginalistas, lo que ya era bien conocido por los primeros exponentes de la teoría dominante, que es imposible medir el capital en "valor" sin conocer ya la distribución del ingreso y los precios. Los fundamentos de la visión liberal de la distribución y el mercado salieron devastados. El clamor de la impugnación en el corazón analítico de la teoría marginalista también le dio una enorme confianza en la capacidad de desarrollar un análisis económico alternativo.
Garegnani no sólo contribuyó de manera significativa a la disputa, sino que en un ensayo de 1963, trazó los avances que se han llevado a cabo para intensificar la crítica de Keynes a la teoría macroeconómica neoclásica. El trabajo de Garegnani permite fortalecer la critica keynesiana justo donde más se expone a la reabsorción de la teoría dominante, aportando una contribución fundamental a la idea de que la teoría de la demanda efectiva de Keynes es válida en el corto y largo plazo, asi como sus preceptos de la política económica.
Aunque la crítica de los años setenta, en términos de teoría del capital se trasladó, nuevamente gracias a Garegnani a nuevos frentes en respuesta al intento neoclásico de escapar de los problemas mencionados anteriormente, continuó con el trabajo de recuperación del punto de vista de los economistas clásicos y Marx iniciado por Sraffa.
Este punto de vista, giraba en torno al concepto del excedente, que es lo que queda del producto social, una vez eliminado lo que se necesita para pagar la subsistencia de la clase obrera. El excedente fue el lugar de los economistas clásicos y Marx como punto de partida de la explicación de la distribución del ingreso, considerado como dependiente del equilibrio de poder entre las clases sociales, el desarrollo económico y la crisis. La determinación de los excedentes sobre la base de la teoría del valor-trabajo, sin embargo, se encontró con los problemas solucionados por el análisis de Sraffa en línea con las indicaciones del propio Marx. Esto significó, sin embargo, el abandono de la teoría del valor-trabajo. En célebres discusiones de esta teoría en Rinascita, Garegnani reconoció el importante papel histórico que han hecho para detener el dominio de la teoría marginalista, sin embargo, consideró que el papel ya no es necesario si la teoría de Sraffa podía ser más rigurosa para sacar las mismas implicaciones en cuanto a la realidad de la explotación capitalista.
Precisión y reserva, y el vínculo con el movimiento obrero, ponen a la figura de Garegnani en continuidad con la de Piero Sraffa de la cual él ha aclarado magistralmente y desarrollado la posición teórica.
No hay comentarios:
Publicar un comentario